miércoles, 28 de abril de 2010

Fragmentos Literarios (II)


Existe desde tiempos inmemoriales la tradicion de mostrar el destino de los traidores ante la entrada principal del castillo y de dejarlos allí hasta que la carne de los cráneos se pudre y las bestias carroñeras los dejan limpios.

La última cabeza fue la de un niño que no había alcanzado el año de vida. Shigeru la clavó en una lanza al final de la hilera de cabezas que había dispuesto frente a la entrada principal del castillo. En el Dominio de Akaoka el inveirno era mas benigno que en las montañas de la isla principal, Honshu. La cabeza de Kudo estaba ya tan corrompida que resultaba irreconocible. Las otras aun estaban frescas, con su reciente agonía todavía estaba viva en sus rostros.

La esposa de Kudo, dos concubinas,cinco hijos, su madre viuda, un hermano, cuñados, cuñadas, tíos, tías, primos, sobrinos y sobrinas. Cincuenta y nueve cabezas en total.

La familia de Kudo estaba extinta.


(Un recuerdo para los traidores) ;)